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Arquitectos: Antonio Abrão Arquitetura
- Área: 1000 m²
- Año: 2022
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Fotografías:João Vitor Sarturi
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Proveedores: Fitz Roy, METALCO, Moving Play, Paradome, Rubber
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Cuando los niños son libres de elegir con qué quieren jugar, su desarrollo se da con mayor facilidad y naturalidad, construyendo poco a poco sus historias, su percepción del mundo y su pensamiento crítico.
Playground Barigui es un espacio que busca respetar lo que es tan preciado para los niños: el tiempo de juego, fomentando el distanciamiento de las pantallas, la autonomía, la libertad y sobre todo la socialización en los espacios públicos, contribuyendo a fomentar el fortalecimiento de la confianza en los demás y el sentido de comunidad.
El equipamiento público es un regalo de Grupo Positivo a las familias de la ciudad, en celebración de su 50 cumpleaños dedicado a la docencia y la educación. Ubicado en uno de los principales parques de Curitiba, el Parque Barigui, que recibe alrededor de 500 mil visitantes al año, su ubicación enfatiza una de las características necesarias para un mejor desarrollo del niño: la conexión con la naturaleza.
El área está demarcada y ofrece seguridad y protección para los más pequeños, a la vez que se integra al paisaje natural del parque, con hermosas vistas al bosque nativo y al lago.
Existen varios tipos de juguetes, algunos de ellos inclusivos, pensados para que los niños puedan disfrutar e interactuar por igual. La selección de equipos busca ofrecer diversidad y opciones de juego para todas las edades, con equipos que fomentan el movimiento, el equilibrio, la diversión, el desafío, la aventura y la interacción.
El diseño del piso engomado aporta comodidad y colores debidamente estructurados para guiar a los usuarios dentro del espacio, sectorizando las diversas opciones de juego. El color azul oscuro del piso dirige el flujo de niños desde las entradas hacia los juguetes; el azul claro define las áreas de "respiración" y de estar; y los puntos naranjas resaltan los puntos donde se encuentran los juguetes principales, como un circuito de cuerdas sinuosas, un bosque de troncos, geodesia, rotonda, balancín y columpio.
Con más de mil metros cuadrados, la propuesta ofrece un espacio multicolor y visualmente estimulante, buscando incentivar la interacción y permitiendo así el conocimiento del yo, del otro y del nosotros, siendo, por tanto, un instrumento para el bienestar mental y físico de los niños.
